Se debe aplicar a todos los niños inmigrantes recién llegados, pero los que proceden de países en vías de desarrollo necesitarán, en su mayoría, intervenciones más específicas. En general, se consideran países en vías de desarrollo todos excepto EE. UU., Canadá, Japón, Corea del Sur, Australia, Nueva Zelanda y los países de Europa Occidental.
Los objetivos son1,2:
VISITA DE ACOGIDA
En la primera visita es muy importante crear un clima de empatía y confianza. Se tendrán en cuenta las barreras idiomáticas y culturales por lo que, en caso de dificultad, recomendamos que un mediador nos proporcione la comprensión de la lengua y la cultura. Si esto no fuera posible, pediremos que vengan acompañados de una persona, familiar o amiga, que pueda hacernos de traductora. En caso de que incluso esto no sea posible, se tendrá que recurrir a los recursos que tengamos a nuestro alcance como traductores por vía telefónica, aplicaciones de teléfono móvil, traductores en la red informática… porque es imprescindible asegurar la comprensión verbal.
En la primera visita hay que recoger, atender e intentar resolver el motivo de consulta y obtener los datos necesarios para la valoración del estado de salud de niño y sus factores de riesgo más importantes. En sucesivas visitas se podrá obtener el resto de información.
La anamnesis debe incluir:
EXPLORACIÓN FÍSICA
Ha de ser completa y detallada. En relación con la población inmigrante, recalcaremos las siguientes exploraciones:
ASITENCIA MÉDICA PREVIA
La experiencia de estos años nos ha puesto de manifiesto la gran heterogeneidad de la población inmigrante, condicionada, sobre todo, por la procedencia, etnia, cultura y nivel socioeconómico.
Los exámenes complementarios deben individualizarse según la procedencia, la exploración física y los factores de riesgo, pero hay algunos que son recomendables realizar a todos los niños procedentes de países de baja renta y que no han recibido una asistencia sanitaria similar a la del país receptor.
Se ha de evitar solicitar analíticas indiscriminadamente, ya que representan un gasto innecesario y una falta de equidad con respecto a la población autóctona, a la cual no se le solicitan.
PRUEBA DE LA TUBERCULINA
Es importante preguntar por los antecedentes de contacto con algún posible enfermo de tuberculosis (TBC), por clínica sugestiva, que en el niño puede ser muy larvada, y por la administración previa de algún tratamiento antituberculoso al niño o a algún miembro de la familia. En estos casos la valoración y seguimiento del paciente será diferente a la indicada en el algoritmo.
La gran mayoría de niños procedentes de países de renta baja están vacunados de BCG, lo que se verificará mediante la visualización de la cicatriz. El haber estado vacunado de BCG no obvia la indicación de realizar la prueba de tuberculina, la cual, idealmente y si no hay sospecha clínica de TBC, debería practicarse tras 10-12 semanas de la llegada del niño, para asegurarnos de que no se encuentre en el periodo ventana.
VACUNACIÓN
En general, se han de aceptar como válidos los registros vacunales aportados por los padres, excepto si hay algún signo sospechoso de falsificación. Se completarán las vacunas según el calendario de vacunación vigente de cada comunidad autónoma.
Se recomienda la vacunación contra la hepatitis A a partir de los 12 meses (salvo serología positiva) por la posibilidad de contacto con familiares infectados que vengan del país de origen y porque son muy frecuentes los viajes al país de origen.
La vacuna antimeningocócica C no se administra en la mayoría de los países de África, Asia y América del Sur. Hay que tener presente que en muchos países se aplica la vacunación monovalente para el sarampión a los 9 meses, dosis que no debe ser contabilizada.
Los calendarios de vacunación de los diferentes países se pueden encontrar en la web de la OMS19.
ACTIVIDADES PREVENTIVAS Y DE PROMOCIÓN DE LA SALUD
Se deben realizar las que corresponden a la edad del niño20-23.
y aquellas que han quedado pendientes de otras edades y que todavía tenga justificación realizar, por ejemplo, en menores de 1-2 años, el cribado de hipotiroidismo y metabolopatías. La educación sanitaria ha de estar adaptada a la cultura de la familia inmigrante.FERROPENIA
La anemia ferropénica y la ferropenia son frecuentes en los niños inmigrantes. La profilaxis se realizará mediante educación sanitaria sobre alimentación y, en ocasiones, mediante suplementación, como en el caso de lactancia materna prolongada sin introducción de alimentación complementaria, introducción precoz de leche de vaca, consumo insuficiente de alimentos ricos en hierro o sospecha de falta de absorción de hierro debido a inhibidores (taninos del té o fitatos).
RAQUITISMO
La profilaxis del déficit de vitamina D se ha de considerar especialmente en menores de 18 meses, en adolescentes de piel oscura, y en aquellos que vayan muy tapados24.
DÉFICITS NUTRICIONALES
Se ha de realizar profilaxis de déficits nutricionales debidos a dietas deficitarias y carenciales (por ejemplo, lactancia materna exclusiva prolongada, niños refugiados, niños de familias con pobreza extrema…). Hemos de estar preparados para la valoración nutricional de dietas “especiales” que pueden ser seguidas por algunas familias inmigrantes por motivos religiosos o culturales. En casos de vegetarianos es necesaria la suplementación con vitamina B12 y, en la lactancia, probablemente, con ácidos grasos omega 325.
MUTILACIÓN GENITAL FEMENINA
Si se atiende a una niña procedente de un país y cultura en el que se practica la mutilación genital femenina (MGF) (en África se practica en toda la zona subsahariana hasta el ecuador, en Egipto, Yemen y países de los Grandes Lagos africanos) y no se ha llevado a cabo, se debe activar el Protocolo de Profilaxis de la MGF4.
SALUD MENTAL
Debemos estar sensibilizados sobre lo que puede representar el duelo migratorio de los niños, los adolescentes y de sus padres, y la adaptación al nuevo entorno, especialmente de los adolescentes. La residencia en barrios marginales, los problemas laborales de los padres y las escasas perspectivas de futuro son factores de riesgo que hay que tener en cuenta. Es importante asegurarse que el niño, si tiene la edad, esté escolarizado.
Mención especial son los menores refugiados. La causa de su migración y las condiciones en que se ha realizado hacen que muchos de ellos estén afectados por un síndrome postraumático. Por tanto, a partir de cierta edad todos tendrían que ser explorados psicológicamente y, en los que se detectase patología, realizar el tratamiento oportuno26. Una primera valoración puede realizarse mediante el test Children’s Revised Impact of Event Scale (CRIES) que se encuentra traducido a diferentes idiomas27.
CONSEJOS AL NIÑO VIAJERO
Los niños inmigrantes y sus familias suelen realizar viajes a su país de origen. Hay que tenerlo presente para antes del viaje dar los consejos y realizar las actividades pre viaje (Decálogo del Niño Viajero28) y después del mismo aplicar el Protocolo de Atención al Niño Viajero29 (https://algoritmos.aepap.org/algoritmo/38/evaluacion-posviaje-del-nino-viajero-).
ESQUISTOSOMIASIS UROGENITAL (UG)
Los países con esquistosomiasis urogenital endémica son los del África subsahariana, los de la cuenca del Nilo y los de Oriente Medio. El cribado se realizará mediante una tira de orina (mejor tras ejercicio) y, en caso de que haya hematuria, se procederá a la recogida de una muestra de orina para la detección del parásito.
Se recomienda, para aumentar la excreción de los huevos, el ejercicio físico previo (ejemplo: subir y bajar escaleras o correr durante unos 5 minutos) y si es posible, entre las 11 y las 14 horas momento en que la excreción del parásito parece ser máxima. La valoración de la muestra de orina por el microbiólogo debe realizarse poco tiempo después de la recogida.
INTERPRETACIÓN DE LA PRUEBA DE TUBERCULINA (PT)16-18
Se considera positiva una induración ≥5 mm:
Se considera positiva una induración ≥10 mm: cualquier otro caso, incluyendo los niños inmigrantes, viajeros y cribados de niños sanos, independientemente de la vacunación con BCG.
HEMOGRAMA
El hemograma nos permitirá detectar anemias5 y eosinofilias: https://algoritmos.aepap.org/algoritmo/26/anemia.
También se recomienda la determinación del antígeno de superficie de la hepatitis B (HBs Ag) a todos los niños, vacunados o no de hepatitis B (HB), a cuyas madres no se haya realizado el cribado de HB durante el embarazo tanto si proceden de países con intermedia o alta endemicidad (≥2%)6 (Figura 2)7, como con si proceden de países con una endemicidad similar a la nuestra (para asegurar la equidad con la población autóctona a la que sí se le solicita durante el embarazo) y con el fin de descartar la trasmisión del virus de la HB por vía vertical.
FACTORES DE RIESGO
Según los factores de riesgo del niño/a se solicitarán las siguientes pruebas complementarias (Tabla 1):
Tabla 1. Pruebas complementarias
¿A quién? |
¿Qué solicitar? |
Niños procedentes de Centroamérica y Sudamérica, excepto islas del Caribe (Figura 3) 8,9 |
Serología de la enfermedad de Chagas |
Menores de 5 años, sobre todo en menores de un año, de raza negra o con ancestros de esta raza |
Estudio de hemoglobinas mediante electroforesis o cromatografía líquida de alta resolución (HPLC) |
Niños procedentes del África subsahariana, adoptados, hijos de madres de riesgo, adolescentes sexualmente activos, pacientes que hayan sufrido intervenciones o transfusiones sin las condiciones sanitarias adecuadas, y los hijos de madres hepatitis C (HC) positivas |
Serología para VIH y HC (Figura 4)10 |
Niños procedentes del África subsahariana, adoptados, hijos de madres de riesgo y adolescentes sexualmente activos |
Serología de sífilis |
Niños procedentes de zona endémica de malaria (Figura 5)11 con proceso febril, especialmente los procedentes de África subsahariana y durante los tres primeros meses posemigración |
Gota gruesa, detención de antígenos específicos o reacción en cadena de la polimerasa específica |
Niños mayores de 7 años procedentes de países endémicos y no vacunados de hepatitis A (HA)12 |
Anticuerpos contra el virus de la HA: solo si el precio del cribado no supera al precio de vacunar |
Niños con anemia con eritrocitos con punteado basófilo o si han presentado pica o han estado expuestos a fuentes importantes de plomo |
Determinación de plomo en sangre13 |
Niños inmunosuprimidos o a los que se les haya de indicar un tratamiento inmunosupresor |
Serología específica para estrongiloides |
PARÁSITOS EN HECES
Se realizará la recogida de 3 muestras de heces, a ser posible en recipientes que contengan solución de mertiolato-yodo-formol (MIF) que preserva tanto los trofozoítos como los quistes. Es importante indicar en la petición el lugar de procedencia del niño.
En caso de imposibilidad de realizar el estudio coproparasitológico, puede optarse por realizar un tratamiento empírico en mayores de dos años con albendazol14.
EOSINOFILIA
Se considera eosinofilia cuando la cifra de eosinófilos es superior a 500/ml. Se clasifica en leve una cifra de 500-1499 eosinófilos/ml, moderada de 1500-4999/ ml, y grave si >5000/ml. Si el estudio parasitológico es negativo se han de descartar las causas no parasitarias de eosinofilia y si el paciente está asintomático y la eosinofilia es leve, realizar control evolutivo.
Tabla 2. Causas de eosinofilia15
Parásitos en heces que causan eosinofilia |
Parásitos, que no están o no pueden ser detectados en heces, que causan eosinofilia |
Parásitos en heces que no causan eosinofilia |
Causas no parasitarias |
Ascaris lumbricoides Ancylostomas, Necator spp. Trichuris trichiura Strongyloides stercoralis Taenias (solium y saginata) Schistosomas Paragonimus Ophisthorchis Fasciola |
Angiostrongylus Anisakis Capillaria spp. Echinococcus Filariasis (Wuchereria bancrofti, Brugia spp, Mansonella spp, Onchocerca volvulus, Dracunculus medinensis, Loa loa) La etapa de cisticerco de la Taenia solium (cisticercosis) |
Entoamoeba spp. Cryptosporidium Giardia intestinalis Enterobius vermicularis (Oxiuros: si la producen es leve) |
-Asma -Atopia -Fármacos -Enfermedades hematológicas: leucemia, linfoma,… -Enfermedades inmunológicas: enfermedad de Crohn, lupus… |
TRATAMIENTO DE LOS PARÁSITOS
En el estudio coproparasitológico pueden encontrarse algunos de los parásitos unicelulares que no se consideran patógenos y que, por tanto, no precisan tratamiento (Tabla 3).
Tabla 3. Parásitos unicelulares del intestino humano
Patógenos |
No patógenos |
Patógenos ocasionales |
Entamoeba histolytica Giardia lamblia Balantidium coli Cryptosporidium parvum Cyclospora cayetanensis Isospora belli Enterocytozoon bieneusi Encephalitozoon intestinalis |
Entamoeba dispar Entamoeba hartmanni Entamoeba polecki Entamoeba gingivalis Endolimax nana Iodamoeba bütschlii Chilomastix mesnili Trichomonas hominis Trichononas tenax Enteromonas hominis Retortamonas intestinalis |
Entamoeba coli Blastocystis hominis Dientamoeba fragilis
|