VALORACIÓN INICIAL
Tras el diagnóstico de Asma (https://algoritmos.aepap.org/algoritmo/50/diagnostico-del-asma), según la gravedad, se iniciará el tratamiento de mantenimiento del asma cuyos objetivos son conseguir el control de los síntomas diurnos y nocturnos, evitar exacerbaciones agudas que pongan en riesgo al paciente, mantener una actividad y una función pulmonar normal1. Todo esto con la menor cantidad de medicamento posible minimizando así los posibles efectos secundarios2. Por ello, las Guías Clínicas aconsejan que el seguimiento del paciente con asma se inicie lo más precozmente posible tras el diagnóstico.
HISTORIA CLÍNICA
En la historia clínica del paciente asmático debe registrarse 3-5 :
CLASIFICACIÓN DE LA GRAVEDAD
La clasificación de la gravedad es diferente según se realice en el momento del diagnóstico (asma episódica o persistente)1 o una vez conseguido el control. En la actualidad las guías clínicas recomiendan clasificar la gravedad retrospectivamente tras 2-3 meses de tratamiento en función del escalón terapéutico preciso para el control de los síntomas y de las exacerbaciones (Tabla 1)1,2.
VALORACIÓN DEL GRADO DE CONTROL DE LOS SÍNTOMAS
El seguimiento de los pacientes con asma incluye la valoración del grado de control de los síntomas (Tabla 2), la evaluación de factores de riesgo individuales o familiares que predisponen a presentar una exacerbación (Tabla 3), el control de las comorbilidades y la respuesta al tratamiento, así como la existencia o no de efectos secundarios a los medicamentos utilizados5. Además de cuestionarios homologados como el cuestionario CAN (Tabla 4).
IDENTIFICAR EL ESCALÓN TERAPÉUTICO NECESARIO SEGÚN GRAVEDAD
Identificar el escalón terapéutico necesario según gravedad1,2. En la Tabla 5 figuran los medicamentos de elección para cada escalón (según GEMA y GINA) así como las posibles alternativas6,7.
EDUCACIÓN EN ASMA1,8,9
SEGUIMIENTO DEL ASMA
El seguimiento del asma se realiza en ciclos de evaluación, ajuste de tratamiento y revisión de la respuesta2. Los pacientes deben ser reevaluados, por lo que estableceremos un calendario de revisiones cuya frecuencia dependerá del grado de control de los síntomas y de la existencia o no de factores de riesgo de exacerbación. La GINA 20212 recomienda control en 1-3 meses tras el inicio del tratamiento de mantenimiento, y cada 3-12 meses una vez conseguido el control. Tras una exacerbación aguda debe revisarse en una semana. Antes de intensificar el tratamiento en caso de mal control, hay que asegurarse de la adherencia al esquema terapéutico propuesto y de que haya una adecuada técnica inhalatoria.
Se planificarán pruebas complementarias según edad y disponibilidad. El estudio funcional o espirometría es un indicador muy útil para controlar el riesgo futuro. Se realizará, si es posible, al diagnóstico, a los 3-6 meses de iniciar el tratamiento y por lo menos una vez al año1,2,4,10, adaptándolo a cada paciente en función de la gravedad y del curso clínico de su enfermedad. En época COVID adecuar espacios y protocolos según recomendaciones de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica de cara a la prevención de la infección por coronavirus11. El estudio de sensibilización a alérgenos se debe realizar en aquellos pacientes en cuya anamnesis exista relación de los síntomas con la exposición aeroalergénica (ácaros, epitelio, pólenes y hongos). Para el diagnóstico de asma alérgica, además de apreciarse sensibilización frente a alérgenos inhalados, es preciso constatar la relevancia clínica de los resultados obtenidos. La prueba de punción intraepidérmica o prick con extractos estandarizados es el método de elección por su alta sensibilidad, bajo coste y valoración inmediata1. Se programará idealmente en el momento del diagnóstico o en alguna de las revisiones posteriores y puede repetirse si la historia clínica de la enfermedad varía y sugiere una relación directa con algún alérgeno testado previamente como negativo3.
BAJADA DE ESCALÓN TERAPÉUTICO
La bajada de escalón terapéutico se realizará en sentido inverso al de subida. En el caso de los GCI, se recomienda una reducción gradual del 25-50% de la dosis cada 3 meses si mantiene un buen control de los síntomas1,2,4,5,9 con retirada del tratamiento de fondo cuando el asma esté controlada con la mínima dosis de medicación en 6-12 meses y no hay factores de riesgo de exacerbación1,2,4,5
REVISAR TÉCNICA Y ADHERENCIA
Recordar revisar técnica de inhalación y adherencia al tratamiento antes de subir el escalón terapéutico.
VALORAR DIAGNÓSTICOS DIFERENCIALES
Valorar diagnósticos diferenciales (ver algoritmo diagnóstico de asma)12.
DERIVAR A NIVEL HOSPITALARIO
Derivar a nivel hospitalario (ver algoritmo diagnóstico de asma)12.